miércoles, 5 de diciembre de 2007

Montados en una bomba

Hace falta valor, con todas sus letras, para entrar en una cabina de pocos metros cúbicos, en la cumbre de una torre de más de 100 metros de altura, cargada por completo con explosivos; algo más de dos millones de kilogramos de explosivos.
Estos datos corresponden a los cohetes Saturno V, usados en los años 60 para transportar tres personas hasta la Luna.
La llegada a la Luna fue uno de los grandes logros de la humanidad. Es la mayor demostración de nuestra ciencia y tecnología, y de lo que somos capaces de hacer como especie. Aquel día se demostró que la Humanidad no estaba condenada a desaparecer destruida por sí misma; que era capaz de salir fuera, explorar, expandirse.
Hay quien dice que el dinero invertido en los viajes espaciales es un malgasto puesto que la gente se muere de hambre en el tercer mundo. En mi opinión, este proyecto, aunque sólo consista en mandar un hombre a pasear a la Luna y volver, sin añadidos, merece una inversión. Mucho más que la ingente cantidad de dinero que se invierte en el mundo en religión, armas, burocracia ... Dinero hay, lo que pasa es que se despilfarra en tonterías.
Todo esto lo cuento para recordar lo que la ciencia, la tecnología y en general, el conocimiento, son unos bienes que debemos cuidar porque son de todos nosotros. El proyecto Apollo no es un logro sólo de EEUU. Es un logro de la humanidad. Sin embargo, los imbéciles del mundo se unen y despotrican contra él por el mero hecho de haber sido financiado por EEUU. Y peor aún son aquellos que lo ponen en duda. Un esfuerzo titánico, puesto en duda por una serie de pruebas que se caen por sí solas, o por creencias sin ningún tipo de fundamento.
Así visto, está muy justificada la respeusta que dio Buzz Aldrin a un individuo que llegó hasta él con una biblia en la mano diciendo reiteradamente "Jure por Dios que estuvo ahí". Su respuesta fue un puñetazo en la cara.

No hay comentarios: